Prisionero soy del silensio que me habla de ti
como una rosa que florece en la soledad del inexistente
presente que me atormenta.
Rosa que nace del amor que tuvimos
y que florece en la soledad pensándole
y sus petalos me dan el
mejor perfume del amor.
Con tu belleza y tambien con espinas,
pero que delicadamene me absorve en este suspirar
de las mas bellas flores.
Prisionero soy de la miel de tus besos,
que endulzaron tardes inolvidables donde el tiempo era
un detalle del paisaje de tu mirada,
donde encontraba la serenidad de vivir.
Soy tu carcelera, mas amada con los besos que te di
como cautiverio.
Te esprese lo que mi corazon y mi alma sentia por vos.
Que el tiempo fue un paraiso hermoso
entre tantas rejas.
Y mis ojos tu mayor sentir con mi mirada te di la vida,
en ellos vistes mi alma y supistes de este gran amor.
Prisionero soy de tus caricias que enmarcaron mi piel
en el sueño que se vive despierto
y se siente dormido, en el fragor
de tus brazos.
Tus manos tatuaron en mi piel, tus bellas caricias, tiernas,
apasionadas, que incluso te sueño y despierta pienso en ellas.
Cierro los ojos y veo tus manos y tu cuerpo
acariciando mi alma en mi subsconciente te desea
y te querra siempre.
Prisionero soy de extrañarte en los laberintos de mi mente
y sentir tu llanto, y no poder estar ahí y calmarlo.
Te extraño te echo de menos
y quiero estar donde tu estas,
te pienso tanto que mis ojos han derramado
alguna que otra lagrima por vos.
Y te han buscado; pero...
desgraciadamente no estas...
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