para derramar mi dicha de tenerte.
Envuelta en amores y deseos
hecho para mezclar tu esencia
con la mía.
Quiero, deseo tu cuerpo
de tenerte desvistiendo estos...
mis deseados antojos para encender
al rojo tus mejillas
para hundirme en el ropaje
de tus carnes.
En la acometida...
a la delicadeza de tu cuerpo
en busca del aro carnal...
oculto entre tus piernas para llenar
mis excesos y mis labios se pierdenen tu selva, bebiendo ese nectar
que se emana de tu fuente.
En soberbios y ardiente deseo
mis carnes buscan
el asilo en tus enjambres...
Donde gravitan los placeres
de mi encendida flama...,
al penetrar tan hondo, al cadencioso ritmo
en carnes llenas de lujuria.
Entrelazados....
Ardientes y desenfrenados
con los labios unidos llenos de frenesí
mecido como olas de una playa
entregados a ese vaiven en busca del placer.
Claro y lujurioso se asoma...
ese grito en la garganta
al clamor de fuertes sensaciones
donde la dicha....
Recorre nuestros cuerpos
plenos de esa gran felicidad...
que nos regala la vida...
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