de conocer las mieles del placer
así me siento...
Esperando el momento de perder
la virginidad,
con miedo al dolor.
Pero valiente, aunque tenga
un delicioso escozor.
En la oscura habitación espero, mientras pienso:
¡Cuanto te he buscado!...
Hasta que te encontré, mi dragón dorado.
Durante un tiempo aprendí la teoría,
ahora la practica es lo que a mi cuerpo y alma bien le vendría.
"Hincada, inocente, sumisa", me ordena...
Yo con la mirada hacia abajo sonrió...
me mojo... y sudo frió.
Atada de las manos y mirándome a los ojos
me levanta con rudeza.
Me lame, me muerde, me excita,
me enloquece que me tome a la fuerza.
Dos, tres, cuatro azotes con la faja mi señor...
extasiada, las entrañas se licuan en mi interior...
Con sus garras me rasguño
y me penetra sin parar y el conociendo
muy bien mi cuerpo me obliga a no terminar...
Obedezco con un buen jalón de cabello,
alcanzo a ver su mirada lasciva...
Que bello!!.
"Por el momento es todo lo que quiero de ti, pero como ha sido buena niña,
de nuevo abusare de ti"...
Con besos húmedos abre mis piernas
y clava dos dedos en mi interior
eres todo un torbellino mi Amo, mi Sr.
Algo increíble me ha pasado
con sus dedos adentro... He terminado.
Los succiono sin cesar...
y el tiene una sonrisa de par en par.
Azotada, mordida y abusada...
estoy por el mas que enamorada.
Quisiera poder retroceder el tiempo,
para poder volver a vivir
este maravilloso placer...
Cobijandome en sus alas mi dragón me dice:
"Tranquila pequeña, ya no hay marcha atrás... esto... apenas esta por empezar"
Y si, porque para mi, todas las noches con el son mi primera vez...
