Cada Tarde

Has despertado en mí mariposas dormidas
y cuando pienso en ti revolotean.
A que es debido esta sensación
que sólo escuchar tu voz mi corazón se tambalea.

Que me has dado, pócima o sólo fue agua de tus labios,
que sólo te bese una vez;
pero mi cuerpo se electrocutó con este instante
en que nuestras lenguas jugaron a amarse.

Se me eriza la piel con tus caricias, y me falta
el aíre cuando estas cerca.

Será que necesito de tu respirar para poder besarte,
amarte, acariciarte.
Acércate a esta alma que te ansía ,
que te adora y haz de esta agitada amante,
tu dulce compañía...

Ella, te seguirá esperando cada tarde.