Y lo sigo esperando a él.
A esa persona que ría mis sonrisas,
llore mis lágrimas, enrede sus dedos en mi cabello
y diga que lo soy todo para él.
Su mejor amiga, su vida su habitación, su mundo
su calma, su pena.
Me llene de abrazos profundos,
largos y calmados, limpie mis lágrimas.
Me vea directamente a los ojos
y me diga que todo estará bien.
Me inunde de besos cortos,
besitos despacios.
Que lea conmigo, que deje apoyar
mi cabeza, en su hombro y me despide del mundo.
Juguemos todas las tardes de verano
y durmamos todas las noches de invierno.
A el... Lo espero.
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